Además de las plagas, existen muchas enfermedades de la vid que pueden dañar y acabar con nuestro cultivo. Aprender a reconocer las enfermedades de la vid, saber porqué aparecen y cómo se tratan nos ayudará a prevenir este problema y salvar nuestra producción.
Conoce nuestro abono especial para viñedos
A continuación te contamos cuáles son las enfermedades de la vid más comunes.
Podredumbre gris o botritis
Esta es una de las enfermedades de la vid más dañinas para los viñedos. Cuando las plantas están infectadas las uvas se pudren y aparecen cubiertas por una masa vellosa producida por los hongos.
Estos hongos pueden dañar directamente los granos, o bien invadir las flores, por lo que los frutos pueden brotar ya infectados.
En climas húmedos, la pérdida de producción por esta enfermedad de la vid puede ser considerable, pues se expande tanto por contacto, como por esporas aéreas.
Existen fungicidas específicos para tratar esta enfermedad en plantaciones de gran extensión.
Es conveniente que si los viñedos se enfrentan a una humedad persistente se mejore la aireación de los racimos mediante el aclareo, suprimiendo algunos racimos o suprimiendo algunos de los sarmientos.
Mildiu
Esta enfermedad de la vid aparece en forma de manchas de color verde pálido en las hojas y moho en el envés. Las zonas afectadas se secan y terminan cayendo. Mientras que los granos enfermos se contraen y se vuelven marrones y correosos.
Las hojas y pámpanos dañados deben eliminarse para evitar que el hongo sobreviva. Si se sospecha una infección por mildiu puede aplicarse cobre líquido antes de la floración de la vid, repitiendo la operación en intervalos de entre 10 y 14 días.
Podredumbre de las raíces o pie negro
Los viñedos son propensos a sufrir infección por hongos de la tierra, capaces de matar a las plantas con una rapidez asombrosa.
Estos hongos aparecen en forma de abanicos blancos que se desarrollan bajo la corteza de las raíces y de los principales sarmientos. Las raíces infectadas pueden tener estructuras color oscuro conocidas como rizomorfas. Estas se desarrollan en el suelo y transmiten la enfermedad a la vid.
Controlar el hongo que causa la podredumbre de las raíces es complicado. Por eso es importante localizar el foco de la infección y erradicarlo. El suelo deberá tratarse con un producto con una emulsión esterilizada, con una solución al 2% de formaldehído. También será adecuado aplicar fitofortificante con acción fungicida.
Roya de la vid
La roya de la vid es otra de las enfermedades de la vid más comunes. Esta también está provocada por un hongo, pero en este caso lo normal es que se den en climas húmedos y temperaturas elevadas.
Algo que hay que saber es que les afecta la luz directa, por lo que es más común en viñedos sin podar.
Conclusión
En Nevian Fertilizantes, nuestra tienda de abonos y fertilizantes online encontrarás todo lo que tus plantas necesitan para crecer fuertes, mejorar su producción y resistir mejor a las plagas y enfermedades de la vid